Uno de los planes preferidos de los Grandes Viajeros para este verano será viajar a Portugal. Y en los alrededores de Lisboa nos estarán esperando algunas de las mejores playas del país.
En la región de Lisboa se encuentran algunas de las mejores playas de Portugal. Inmensos arenales y calas vírgenes para todos los gustos y muy populares entre los más deportistas, porque estas costas recortadas, en las que el viento hace constante acto de presencia, son de las mejores del mundo para la práctica de surf, kitesurf, windsurf…
Cascais
El pequeño pueblo de Cascais con su aire cosmopolita se ha conviertido en un sitio de lo más trendy, con numerosas terrazas que brindan la mejor forma de disfrutar del espectacular paisaje en buena compañía. Este antiguo pueblo de pescadores se convirtió en un famoso destino de veraneo entre los lisboetas cuando el rey Luís I se bañó en sus playas. Sus tres bahías –Playa de la Conceiçao, Playa de la Rainha y Playa de la Ribeira– atraen a los turistas para disfrutar del sol y chapotear en las aguas del Atlántico.
Desde Cascais, los más deportistas pueden acercarse a practicar surf a la Playa del Guincho, a sólo 9 kilómetros al noroeste, o dar un paseo en bicicleta por el paseo marítimo hasta Estoril.
Caparica
Muy cerca de Lisboa, hacia el sur del río Tajo, está la Costa de Caparica, famosa por la cantidad y calidad de sus playas recomendables durante todo el año. Allí hay numerosas escuelas de surf, asociaciones de pescadores o grupos deportivos que nos da una idea de lo dinámica que es siempre esta área. A pocos metros abundan los restaurantes y chiringuitos que nos permiten disfrutar del sol veraniego mientras degustamos pescado a pie de playa.
Este conjunto de playas se extiende por unos 20 kilómetros de longitud, desde la localidad homónima que les da nombre hasta Fonte da Telha, siendo la zona de playa más grande de Europa, e ideal para practicar surf y bodyboarding.
Setúbal
La costa de la Península de Setúbal es perfecta para tomar el sol y disfrutar de su sabroso pescado a la parrilla. Caminando hacia el sur, está el animado puerto de Setúbal, ideal para comer chocos fritos (calamares) y visitar en familia.
En Setúbal nos encontramos playas para todos los gustos: la playa de Meco, muy conocida por los aficionados al naturismo con aguas cristalinas similares a las de las islas tropicales; o Portinho da Arrábida, una de las más bellas playas portuguesas, con fina arena blanca y aguas transparentes, al pie de la Serra da Arrábida.
Sesimbra
Sesimbra es una pequeña ciudad dedicada a la pesca que ofrece, además de playas de aguas turquesa y arena fina, buen pescado y marisco en los restaurantes de su paseo marítimo. Pero En Sesimbra, situada en la Península de Setúbal, su castillo ofrece las mejores vistas del valle y la costa. Elevado a 200 metros sobre la ciudad, en su recinto amurallado se encuentra la Iglesia Santa María do Castelo, donde admirar el altar dorado y sus azulejos.
Ericeira
A media hora de Lisboa, la pintoresca villa pesquera de Ericeira “huele a mar”: desde restaurantes con pescado y marisco hasta el ambiente de sus calles adoquinadas con casas pintadas de blanco y azul. Sus playas son una referencia para los surfistas de todo el mundo.
Santa Cruz
El peñón de Guincho es el icono de la playa de Santa Cruz, un inmenso arenal al norte de la región de Lisboa cuyos tramos toman diferentes nombres pero que tienen en común excelentes instalaciones, lo que la hace muy popular entre las familias de la zona.