Samsonite nos descubre en su estudio The Travel Futures cómo serán los viajeros del futuro.
Siempre conectados, a la búsqueda y disfrute de experiencias, y dejando a un lado el sentido de propiedad: el perfil generacional millennial ha llegado, también, a la industria turística, ávida de nuevos mercados, nuevos nichos de clientes… y de herramientas que le permita analizarlos, fidelizarlos, satisfacerlos. En torno a las nuevas tendencias del viaje giró el evento que Samsonite organizó hace unas semanas en Casablanca y en el que, con la colaboración de The Future Laboratory, presentó las conclusiones del estudio The Travel Futures, que traza las líneas generales del mapa vital de los nuevos viajeros del futuro, a los que la marca quiere acompañar, como lleva haciendo desde hace cien años, con sus diferentes líneas de equipaje, cuyas novedades de la temporada 2019 se presentaron también durante el evento.
Tecnología, movilidad, experiencias y sostenibilidad: los puntos cardinales de la brújula del viajero del futuro
En su estudio, Samsonite y The Future Laboratory detectan y definen cuatro nuevos perfiles de viajeros –Young Urban Explorers, Uneasy Affluents, Co-sharing Economists, The New Experientialists-, con unas características muy concretas, numerosos puntos de conexión entre ellos, y necesidades compartidas: entre ellas, las de contar con soluciones de viaje que sean sostenibles, enriquecedoras y útiles. Las líneas de conexión de los integrantes de estos tipos de viajeros están claras: un uso inteligente de la tecnología para los jóvenes exploradores urbanos, la afinidad a marcas e iniciativas que buscan la sostenibilidad que sienten los prósperos inquietos, el consumo inteligente de los consumidores colaborativos, o la búsqueda de experiencias diferentes que guía a los nuevos experimentadores.
A esas necesidades de los viajeros del futuro quiere dar solución Samsonite, que presentó las nuevas líneas de producto que irán comercializándose a lo largo de 2019, y que comparten entre sí el ADN de la marca: su durabilidad, su comodidad y su sostenibilidad. Es el caso de la línea Neoknit, en la que encontramos maletas, mochilas, bolsos de mano o riñoneras, tejidos todos ellos con hilo de botellas PET recicladas, -una maleta de cabina de la línea se fabrica con solamente 22 botellas- y que ya desde su diseño tiene en cuenta el compromiso medioambiental. “La base de Samsonite en sus más de ciento diez años de trayectoria es el fabricar productos concebidos para durar, no solo para que se puedan emplear durante un único viaje, o un solo año”, nos cuenta Lotte De Vreese, General Manager Samsonite Travel & Casual. “Usamos PET reciclado en treinta de nuestras líneas, y Neoknit es el mejor ejemplo. Cada producto está diseñado para minimizar al máximo los cortes del tejido para generar el menor desperdicio posible durante la fabricación”. El diseño de la línea, minimalista y de colores vivos, ha merecido el prestigioso premio de diseño Red Dot Award 2019.
Sostenibilidad en Samsonite
El de la línea Neoknit es solo un ejemplo más del compromiso de Samsonite con la sostenibilidad. “En Samsonite investigamos constantemente en cómo emplear materiales usados en lugar de nuevos, siempre con el objetivo de crear productos duraderos”, nos explica Lotte de Vreese. “En nuestro laboratorio, al que llamamos Turtle Room, hacemos numerosas pruebas a todos nuestros productos para garantizar su durabilidad. La sostenibilidad está en las cosas grandes, pero también en las pequeñas. Por eso, trabajamos en cómo reducir la huella de carbono, hemos invertido en paneles solares e nuestras fábricas, hemos plantado cerca de medio millón de árboles el año pasado, instalamos luces led en lugar de las clásica y, lo que es muy importante, el cómo tratamos a la comunidad de personas que trabajan en nuestras fábricas.
Los viajeros del futuro buscan la conectividad en todo momento y la comodidad, y ambas están definidas indefectiblemente por la tecnología. “La tecnología evoluciona con mucha rapidez, así que estamos trabajando en varias áreas a la vez, poniendo el foco en la posibilidad de cargar nuestros dispositivos, la seguridad y la proximidad. Una solución muy interesante y útil es la de implementar en los equipajes una toma USB con power bank, y etiquetas que emparejan el equipaje con el teléfono vía bluetooth, y que permiten localizarlo o incluso saber su peso de un modo muy calibrado. En general, creemos que las soluciones de carga estarán cada vez más presentes, tanto en los modelos de cabina como en los más grandes, en los que es muy importante conocer el peso, sobre todo en esos momentos en los que, al facturar, no sabemos si nos estamos pasando o no y comenzamos a hacer puzzles con el equipaje abierto…”
Otra de las características que comparten las diferentes líneas de producto que Samsonite presentó es su ligereza. Con maletas cada vez más y más ligeras, ¿dónde está el límite? “Nuestro departamento de desarrollo nos dice a veces que tenemos unas ideas muy locas” -confiesa entre risas de Vreese. “Sí, tiene que haber una frontera de peso que no se podrá traspasar, pero aún no la hemos alcanzado. Por eso, seguimos innovando, investigando con nuevos materiales, cuestionándonos donde estará ese límite. Y como empresa que se debe a sus clientes y que ofrece en sus productos una garantía de por vida, persiguiendo el balance entre un peso ligero, la calidad y comodidad”.
