Déjate fascinar por las maravillas de fábula que te esperan en el triángulo mágico de la India donde brillan Delhi, Jaipur y Agra. Nunca antes habrán trabajado tanto tus cinco sentidos.
India es sinónimo de Gran Viaje, un territorio obligado para los mejores viajeros, que saben que todo tiene cabida en el universo indio: todos los estímulos, todos los contrastes, todas las certezas… Y nada para experimentar en primera persona la magia india que viajar al norte de la India, en cuyas tres ciudades más importantes –Delhi, Jaipur y Agra-, donde esperan, además, algunos de los escenarios más reconocibles del planeta.
La infinita Delhi
Delhi, la capital india, es una ciudad inmensa de 20 millones de habitantes donde confluyen el carácter tradicional de la Ciudad Vieja y la herencia inglesa de Nueva Delhi. La mirada del Gran Viajero se pierde ante la inmensidad de sus avenidas, que buscan el marco imponente de la Puerta de India, el memorial en honor de los soldados caídos; el Rashtrapai Bhavan, el palacio presidencial, o de dos lugares Patrimonio de la Humanidad de Delhi: el Qutab Minar, el minarete más alto del mundo, y la tumba del emperador Humayun.
Pero hay más: en el Viejo Delhi, de callejuelas caóticas y repletas de vitalidad, no dejes de conocer los dos polos de la espiritualidad de la ciudad: la mezquita de Jami Masjid, y el Gurdwara Bangla Sahib, el templo sikh más importante de Delhi.
Jaipur, la Ciudad Rosa
En Jaipur, la Ciudad Rosa, te espera el Hawa Mahal, o Palacio de los vientos, el antiguo harén del palacio de la ciudad, con su fachada de arenisca rosa de casi mil ventanas por las que se asomaban las cortesanas para contemplar el tremendo espectáculo del frenesí del Zoco.
Pasea por las salas del Palacio de la Ciudad, hogar del Maharajá de Jaipur, adornadas con bóvedas de diminutos espejos, elefantes de mármol de tamaño natural o puertas enchapadas en oro. ¡Auténtico lujo asiático! Y no dejes de ascender a lomos de un elefante al fuerte Amber, que domina la ciudad: un recuerdo que te acompañará siempre…
El Taj Mahal, un canto al amor eterno
Como lo hará el de tu visita a una de las siete maravillas del mundo moderno: el Taj Mahal, en Agra. Tu retina se llenará con la contemplación del monumento en uno de los escenarios más icónicos del planeta. El mejor y más bello ejemplo de arquitectura mogola, el mauselo y edificios secundarios, como la mezquita o los jardínes, fueron construidos a orillas del río Yamuna entre 1631 y 1654 por orden del emperador Sha Jahan en recuerdo a su esposa fallecida, Mumtaz Mahal, lo que le ha convertido en el eterno monumento al amor.