Buena música, atardecers de infarto, gente divertida… Los beach bars de Baleares son tan maravillosos que te quedarías a vivir en ellos, ¡y nosotros, contigo!
Cala Escondida. Platges de Comte (Ibiza)
En la tranquila cala Es Racó d’en Xic se ubica el no menos tranquilo chiringuito ecológico, sencillo y respetuoso con el medio ambiente de Cala Escondida, porque aquí la música la pone el buen ambiente que se respira y que, espontáneamente, se cuela en los conciertos improvisados que se montan para contemplar la apabullante puesta de sol cada tarde. Se puede desde desayunar a base de zumos naturales y tostadas con aguacate, hasta disfrutar de la deliciosa cocina beréber que preparan, ¡un escándalo de lo rica que está!
Beso Beach. Playa de Cavall d’en Borràs. (Formentera)
Los veranos en Formentera no serían lo mismo sin este chiringuito donde, además, ha trabajado uno de los participantes de la quinta edición de MasterChef, el granadino Jorge Brazalez. Buen ambiente y lo mejor de la gastronomía vasca y mediterránea, unos mojitos que quitan el sentido y unas puestas de sol de infarto: ¿qué más necesitas para ser feliz?
S’Embat – Playa de Ses Covetes (Es Trenc, Mallorca)
Un lugar idílico en un entorno aún más idílico donde te proponen el mejor plan: buena comida (¡atención a su paella!), buena compañía, buena música en directo, y hasta actuaciones de circo o teatro. En definitiva, buen rollo: y es que basta poner un pie en el Xiringuito S’Embat para hacer tuyo su lema: ¡La vida es maravillosa!
Es Bruc. Playa Santo Tomás (Es Migjorn, Menorca)
No hay verano en Menorca sin acercarse a disfrutar de las espectaculares vistas que ofrece la terraza a pie de playa del restaurante Es Bruc, donde además se come muy rico, y que desde 1951 lleva regalando a todo el que se acerca hasta allí días de playa de esos que te ayudan a recordar las vacaciones todo el año. Del agua al chiringuito, del chiringuito a la tumbona y poner el broche de oro con la maravillosa puesta de sol. ¡Prueba y verás!