Te descubrimos un secreto viajero a un paso de Madrid: las espectaculares y casi desconocidas barrancas de Burujón, en Toledo.
Un reportaje de Ángel Ingelmo.
Las barrancas de Burujón son un espectacular paisaje a unos treinta kilómetros de Toledo que sorprende tanto por su colorido -a más de uno les recordará el Gran Cañón, a otros las leonesas Médulas-, pero que tiene la suficiente personalidad para ser un paisaje único. Una serie de cortados y cárcavas creadas en un suelo arcilloso que le da su color rojizo y que acaban en las aguas del Tajo, aquí retenidas por el embalse de Castrejón y que las aves han elegido para anidar. Así es fácil contemplar patos, cigüeñas, cormoranes, garzas…

El paraje, declarado Monumento Natural en 2010, se hizo famoso tras un anuncio de Coca Cola en 2013 y ha sido bien acondicionado para recibir a sus visitantes. Junto a la carretera que va de Toledo a Puebla de Montalbán (CM 4000), a la altura de Burujón y a la parte izquierda, se ha acondicionado un aparcamiento y a partir de aquí se continuará a pie hasta los miradores (Senda Ecológica).
Os proponemos ir a todos, ya que cada uno ofrece una vista diferente y el trayecto no es muy largo -no llega a cinco kilómetros. Otra opción es continuar la ruta siguiendo las barrancas con regreso al aparcamiento -ya serán unos diez kilómetros- o, si se tienen más ganas de caminar, continuar una ruta de senderismo hasta la Puebla de Montalbán, lo que ya supondrá unos 25 kilómetros. Todo un plan viajero a un paso de Madrid.