En Amarapura, la Ciudad de la Inmortalidad, a las afueras de la ciudad birmana de Mandalay, se encuentra una de las imágenes más reconocibles de Myanmar, el puente U-Bein, que con sus 1.200 metros y sostenido por 1.089 pilares, es el puente de madera más largo del mundo.
Construido en 1782 con teka procedente del Palacio Dorado ya que la ciudad fue capital real, el puente es en la actualidad todo un espectáculo, curioso y bullicioso, a partes iguales. Recorrerlo a pie y sentir el ir y venir de monjes, pescadores, vendedores y artesanos es todo una experiencia viajera inolvidable. Y toma nota: ¡contemplar la hora dorada del atardecer dando un paseo en barco por el lago es obligatorio, Gran Viajer@!